Ikuychi ta ñuka Ecuador… Bienvenidos todos a Ecuador

Estos son nuestros volcanes, nuestras sierras y ríos

Aquí están las playas. Allá juegan las islas más fieras del planeta. Y muy adentro, en la Amazonía pura, despierta mi Ecuador

Aventura y pasión

El Ecuador se abre al mundo para mostrar la diversidad que habita en su grandeza nacional. Es tierra de gente que sabe ofrecer lo más lujoso de la tradición en la más preciosa sencillez. Hay mucho por vivir en el país donde se encuentra La Mitad del Mundo y el punto más alto del planeta, ubicado en la cima del Volcán Chimborazo, cumbre que arrebató la supremacía al Everest en medidas de altura.

Lujo y sencillez

Ikuychi ta ñuka Ecuador es dar la bienvenida en kichwa a todos los que se atreven a conquistar la costa ecuatoriana con un mar que asombra por su color tenue como una joya turquesa. Hay demasiada arena en las rutas del pacífico que baña al país donde la ciudad de Guayaquil, la metrópolis ecuatoriana, recibe el nombre por la apasionante leyenda de Guayas y Quil. Bienvenidos al Ecuador lo dicen también los 14 idiomas ancestrales que dan tonalidades y armonías al habla de esta nación múltiple.

Fuego y nieve

Es tierra de Volcanes el Ecuador que tiene en los Andes sus más preciados parajes serranos. Se levantan con rostro de desafío y cumbres que coquetean al visitante. El volcán Tungurahua es altivo y parece que le habla a lo lejos al Chimborazo, tan esbelto, que compite en altura con el monstruoso Cotopaxi. Más tranquilo el Pichincha contempla la ciudad de Quito, ciudad capital donde muchos aseguran que fue el sitio donde nació el gran Atahualpa. Otros dicen que el mítico ecuatoriano llegó al mundo cerca del volcán Imbabura.

Sazón y delicia

Si el alimento de los dioses del Olimpo es la ambrosía, en el Ecuador se llega a ser un Dios genuino con cada bocado. Es imposible enumerar la enorme cantidad de platillos típicos y sus variantes según las regiones y el corazón de quienes los preparan. Desde el hornado y las tortillas de papa de la Sierra, los ceviches y bolones costeños, hasta el Maito de tilapia y la deliciosa agua de guayusa de la Amazonía, el reto es sencillo… comerse el Ecuador es una delicia.

Música y Baile

Danzan en una armonía Andina los que visten atuendos de colores, sombreros, pieles, sandalias típicas y no faltan las plumas. Brilla la sonrisa en los rostros que sienten el placer de la música en el carnaval. Por calles y empedrados los cuerpos saltan, gritan, giran hombres y mujeres dando volteretas y agitando las telas de cuadros, de rayas, de tonalidades y tejidos vivos… como piedra preciosa que se adora es el carnaval ecuatoriano.

Razas y suspiros

Por allá anda el indígena, piel canela, cargado de misterios entre árboles legendarios en el medio de la mítica Amazonía. Lleva líneas de colores en su rostro, plumas en sus brazos y el cabello negrísimo vuela con la briza de la selva. Sube la cima nevada el serrano, piel cobriza, que va en busca de hierbas milagrosas, se ajusta el poncho de colores y respira profundo al ver la hermosura de las quebradas. Lanza la red para la pesca agradecida el mulato, que sabe esperar en las aguas de la costa, y con paciencia ve llenarse su canasto. Blanca la piel que se enrojece bajo el sol de las islas Galápagos, descubriendo el reino animal.

Inicio y Fin

En Ecuador comienza y termina el sur, pero también, como por arte de magia, comienza y termina el norte. Es la Mitad del Mundo el punto más sorprendente. Una línea amarilla separa los hemisferios, por eso puedes hacer realidad el sueño de estar en todas partes, en el sur y en el norte al mismo tiempo, poniendo, aquí en la Mitad del Mundo, un pie en el Norte y otro en el Sur.

Ikuychi ta ñuka Ecuador… Bienvenidos al viaje de toda la vida